El Colegio Santa María, que hoy acoge a niños y niñas desde los dos años de edad hasta jóvenes de undécimo grado, reconocido por su excelencia educativa, es fruto del esfuerzo de personas y familias generosas que apostaron y siguen apostando por una educación católica y la centralidad de la familia en la sociedad.
La Sra. Ninin Peschiera de Novelli tuvo la feliz iniciativa, junto con sus hijos y nueras, de crear un nuevo colegio en Chincha bajo el cuidado maternal de Santa María, con el convencimiento de que la educación católica es esencial para el desarrollo de nuestra región y nuestro Perú.
El 22 de marzo de 1983 se creó el Colegio Santa María y la primera presidenta de la promotoría fue la Sra. Ida Natteri de Toce y el primer director el Profesor Víctor Bolívar Pérez. El Colegio iniciaba con los niveles de inicial, 1º y 2º de primaria y 1º y 2º de secundaria.
El 1 de abril de ese mismo año, con humildad, con sencillez, con piso de cemento y aulas sin ventanas, pero con entusiasmo y calor familiar que nos han marcado desde entonces, se abrieron las puertas del Colegio para albergar a 96 niños y jóvenes. Se buscó desde el primer momento integrar lo académico en el contexto más amplio de una formación integral humana y cristiana. Siempre se ha alentado al niño o joven a crecer en la vivencia de la virtud, teniendo como amigo y modelo al Señor Jesús.
En 1986 las familias fundadoras cedieron generosamente el Colegio al Sodalicio de Vida Cristiana. Nuestra primera promoción egresó ese mismo año y, en 1994, lo hizo la primera promoción con alumnos que se formaron desde el nivel inicial.
Nuestra propuesta educativa, junto a la Red de Colegios a la que pertenece el Santa María, siempre ha buscado estar a la vanguardia de la pedagogía en el país. Con este propósito, en el 2017, se sumaron niñas a nuestra comunidad educativa y con ello se unió más a la familia. La acogida de la nueva propuesta del Colegio coeducacional con aulas diferenciadas ha sido excelente. Hoy muchos hijos e hijas de antiguos alumnos son parte de nuestros estudiantes.
Los años han pasado y los rostros cambiado, pero la identidad, el entusiasmo y el calor familiar se mantienen en el tiempo.
En la actualidad, entre los antiguos alumnos, son muchos profesionales en todas las áreas, cuyas actividades las desarrollan no sólo en el Perú, sino en muchos países del resto del mundo.
